“Elogio de la pérdida” (Interzona, 2016) de Ariel Idez muestra como muy pocos libros la amplitud que puede tomar la literatura en la creación de metatextos. Haciendo foco en un género tan particular como los textos que se preparan para las presentaciones de las obras, el autor muestra su versatilidad, humor e ingenio como una puerta a la lectura tanto de su obra como la de otros escritores.
por Gustavo Yuste en La primera piedra │ Septiembre de 2017
La literatura, como cierta clase de hongos, tiene la capacidad de crecer y reproducir a su alrededor pequeños formatos que van rodeando al original. En ese sentido, las presentaciones de los libros son el hábitat natural para que crezcan metatextos que van formando un anillo alrededor de la obra principal, y Elogio de la pérdida (Interzona, 2017) de Ariel Idez da cuenta de la riqueza que un género tan particular puede tener, al agrupar 11 textos ideados para dichos eventos.
Haciendo honor a la temática del libro, Elogio de la pérdida cuenta con una presentación escrita por el propio Idez, donde ya se puede adivinar la flexibilidad y la riqueza de recursos de la que se sirve el autor a la hora de encarar lo que para muchos puede ser algo ligero o pasajero como un texto realizado para introducir un nuevo libro. Cabe destacar, a esta altura, que hay una serie de reglas dentro de este metagénero como, la más obvio, no spoilerar nada.
Idez se anima a dar su propia definición de las presentaciones de libros: “Textos breves y potentes, escritos al calor de la urgencia que nacían, como un coleóptero, para vivir un día de esplendor y después desaparecer consumidos en las llamas de la utilidad”. Sin embargo, al igual que un coleóptero o una mariposa, la corta vida útil de estos escritos no los exime de estar llenos de extravagancias y particularidades que los hacen únicos, algo que se puede ver a lo largo de todo el libro.
Por último, cabe destacar que no solo la propuesta de editar un libro sobre presentaciones de otros libros es novedosa, sino que cada uno de los once títulos que aparecen presentados en Elogio de la pérdida, entre los que se incluye uno del propio Idez, son también una apuesta que va más allá del típico lomo que cubre una cierta cantidad de hojas. Lo que es difícil de determinar es si esa riqueza aparente que tienen los libros presentados son por fuerza propia o por el talento de Idez para este metagénero. En definitiva, habrá que hacer la prueba y ese, tal vez, es el mayor aporte de este libro: una lectura que abre la puerta decenas de lecturas más.
Nota original: https://www.laprimerapiedra.com.ar/2017/09/resenas-caprichosas-elogio-la-perdida-ariel-idez-arte-la-presentacion/